lunes, 31 de marzo de 2008

Error de cálculo

Era mediados de junio creo, ya hacía un poco de frio y se acercaba el primer parcial de Historia en la facultad. Para ese entonces ya habíamos conformado un grupo de 9 personas cuando cursábamos la parte práctica de la materia.
Y la cosa se venía complicando, no mucho, pero si para tener que verdadera y literalmente estudiar. Así que decidímos juntarnos a estudiar. Así lo hicimos o por lo menos lo intentamos, porque al cabo de unos minutos todo era un caos. Nueve personas hablando de cualquier cosa menos de la materia.
Así pasaban temas como la moda, la tele, el cine, las salidas, los recitales, la que se había cortado el pelo, el ayudante que se transaba a tal alumna, la ultima borrachera, el último capítulo de 'Gasolersos' y cosas por el estilo; y pasaban los mates (o una infusión verdosa con ganas de serlo), el café, el té y cualquier otra cosa que te mantuviera despierto.
Estas reuniones al estilo 'Vulnerables' duraron una o dos semanas máximo, y llegada la fecha, nadie tenía algo claro de lo que íbamos a rendir.
Y entró el pánico, la desesperación por tratar de comerse las fotocopias tratando de que el cerebro las asimilara y así poder aunque sea zafar. El caos era cada vez mayor, parecíamos una tripulación que después de meses y meses de navegacion no ve tierra ni en la cubierta del barco; estábamos a la deriva. Algunos se aferraban a los resúmenes incompletos sacados de las fotocopias incompletas también.
Otros optaban los cuadros sinópticos, o los conjuntos para los más rudimentarios. Otros pedían a la virgen y al cualquiera que llevara túnica. Otros pensaban viajar al Congo y mandar certificado, otros enfermarse de algo muy contagioso, y los más osados hasta pensaban en tirarse debajo del tren.
Pero logramos enfrentar la realidad y allá fuimos al parcial a las 7 de la mañana. A copiarnos.
El aula era un auditorio, así que daba para intentar algún tipo de "ayuda memoria". Todos teníamos resúmenes, fotocopias o cualquier cosas que sirviera para el caso. Tema 1. Tema 2. La luz era tenue así que más a favor; entonces nos acomodamos en hilera, con block en mano y papeles escondidos. Y los últimos en llegar fueron los que habían conseguido (como siempre) a última hora unas fotocopias de unos resúmes casi milagrosos según decían.
El silencio era casi de misa, esperando que el titular arrancara con las preguntas. Nos mirábamos como en el patíbulo, las manos nos sudaban y las lapiceras giraban en nuestras manos como si fuerámos bastoneras. Y pasó lo inexplicable. Esa señal de que algo no va a salir bien. Que los astros no te acompañan y que los dioses no están con vos.
Un grito, un sólo grito y venía de nuestro grupo. Una de las chicas al borde de las desesperación sólo atinó a gritar a viva voz... Me las sacó cortadas!!!! Diego... me las sacó cortadas!!!!.
Nunca volvimos a llevar fotocopias.

No hay comentarios:


calle 7